Supongamos que estos libros existen, ¿Tú cuál elegirías?

LIBRO 1:

Aprende a decir NO mientras sonríes.

Raúl era un reciente jubilado decidido a ser el mejor vendedor multinivel de su zona.

Como todos los domingos, salía a las 7 de la mañana a leer el periódico mientras tomaba su taza de café.

Clemente por su parte, era un fiel Testigo de Jehová que había prometido tocar puertas para predicar la palabra de su Dios a la misma hora.

Quien iba a pensar que después de coincidir con una taza de café, Raúl y Clemente compartirían ahora una misma rutina:

• Ambos tomarían café, debatirían sobre religión y productos, y una vez dejada en clara su postura y su rotundo NO hacia la propuesta del otro, sonreirían y se despedirían mientras se agendaban para la próxima semana.

Fue el paso del tiempo el que llevó a Raúl a quedarse sin café y a Clemente a cuestionar a su propio Dios, que sin saber si fue cuestión de suerte, soledad ó convicción, sabían que todos los domingos a las 7 de la mañana se tendrían el uno al otro a cambio de un “NO” con una sonrisa.

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LIBRO 2:

La última Coca-Cola del desierto.

“La última Coca-Cola del desierto” relata la vida de Renata, una soltera de 35 años que desde chica fue educada para ser la mujer perfecta.

Su madre repetía incansablemente: “ERES LA ÚLTIMA COCA-COLA DEL DESIERTO, ¡ACTÚA COMO TAL!”, así que desde chica ese había sido su objetivo:

Ser la inalcanzable, codiciada y asediada mujer que todo hombre querría tener.

Es tras la inesperada muerte de su madre, que la vida de Renata se ve obligada a dar un giro de 180 grados. No puede evitar cuestionar su infundada filosofía de vida al verse completamente sola definiendo los detalles de dicho funeral, cuestionándose a sí misma si esa Coca-Cola del desierto era la última por codiciada o porque simplemente nadie la quería.

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LIBRO 3:

Haz de tu vida un papalote.

Karina es una recién egresada de la carrera de administración que tenía como adorable pasatiempo LA PAPIROFLEXIA. Había dedicado años enteros a este placer culposo y por ende ahora se jactaba de poder realizar cualquier figura con un pedazo de papel: ranas, flores, corazones, perros, gatos, TODO.

El día de su graduación, recibe su titulo (ahora el pedazo de papel mas valioso para ella) y decide tomar la primera decisión importante de su vida: INDEPENDIZARSE.

La decisión parecía emocionante en un principio, pero bastaron unos días para que se cuestionara de manera frustrada el hecho de cómo pudiendo realizar cualquier figura con un pedazo de papel, era ahora tan difícil el hacer de su vida UN PAPALOTE.

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A pesar de ser un simple ejercicio de creatividad, el resultado de las premisas terminaron llamándome la atención y ¡Me dieron ganas de leer las 3! Pero, para eso:

TENDRÍA QUE ESCRIBIRLAS.

¡Ja!